Esperanza Perdida en el PRM

Por Víctor De Oleo

Las elecciones del  el 5 de julio del 2020,  marcaron la rotura de una hegemonía política de 16 largos años de poder político del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en la Republica Dominicana, donde valientes hombres y mujeres que sufrieron  ese estrago, decidieron realizar un cambio estructural y social, a favor de los dominicanos.

Este mismo grupo de personas de a pie, se enfrentaron a una pandemia que arropaba el mundo y a pesar de ese  mal salieron airoso con la esperanza de un “cambio”. Pero es evidente que ese mismo “cambio” fue  reemplazado por servidores de las ideas capitalistas, solo fueron importante para enfrentar el poder avasallador del PLD, pero su dignidad como servidores de la patria y partícipe de la democracia no fue tomada en cuenta.

El Partido Revolucionario Moderno (PRM), debe ser un partido inclusivo y favorecer de manera equilibrada a los dirigentes de todos los sectores, no solo a un grupito que ha concentrado todo en su entorno y que cuenta con la complicidad de otros.

El débil accionar, a favor primero de su membresía que lo llevó al poder, y al no resolver el problema de los nombramientos de los compañeros, han provocado un fuerte desencanto, que quiérase o no, podría repercutir en las próximas elecciones, castigando a  los funcionarios que  se han endiosado, no sabiendo que fruto del trabajo  de la base es la fuente de sus ingresos en el gobierno.

En la mayoría de los funcionarios, se ejerce el clientelismo natural de la política, los directores y ministros no son cercanos a la base partidaria del PRM, estos terminan nombrando a quienes conocen. Si a quienes conocen son del PLD, PRD, FP, PRSC o amigos y familiares, consecuentemente estos serán los agraciados.

En tal sentido, lo que sabemos está tejido con los hilos del recuerdo y de la memoria, cuando nos acercamos al sufrimiento y a las emociones, los recuerdo permanecen  en la memoria de esos hombres y mujeres que lucharon en contra de dos pandemia una con 16 años y la otra con tan solo meses las cuales le quitaban la vida lentamente.

Me pregunto  ¿Acaso el gobierno de Luis Abinader puede sostenerse sin partido?

Victor De Oleo (quien escribe), es licenciado en Comunicación Social, mención Periodismo y Abogado.